GALLETAS DE MANTEQUILLA DE CACAHUETE, BRUJITAS GALLETERAS.

Hola de nuevo brujit@s de la red, espero que estéis deseando que lleguen estos post galleteros porque yo estoy deseando escribirlos y compartirlos con todos vosotros. Esta receta sale nuevamente de mi colección “Delicias al horno”, la verdad que le estoy sacando partido, jajaja y así vosotros también.

Mi foto no se parece al de la colección.

En este caso el resultado final se parece más a unas pastas que ha unas galletas, pero están la mar de crujientes y muy ricas, para mi mama un poco dulces para mi perfectas. Y un poco mas abajo podréis comprobar que con una pequeña modificación en casa le dimos más uso.

Con la receta que os pongo os van a salir unas dos docenas y quizás un poco más:

• 200 gr. de Harina.
• 125 gr. de Azúcar extrafino.
• ½ cucharadita de Canela en polvo.
• 125 gr. de Mantequilla fría, en trozos.
• 50 gr. de Mantequilla de cacahuete.
• 1 Huevo.
• Mermelada de frambuesa, para decorar.

Como siempre la recetita es bastante sencilla.

Tamizar la harina y le añadimos el azúcar y la canela mezclando bien. Incorporamos la mantequilla y con la punta de los dedos mezclamos hasta que tenga la pinta del pan rallado.

Por otro lado mezclamos la mantequilla de cacahuete con el huevo, parece que se corta pero dadle bien que se queda muy cremoso.

Añadimos esta crema a nuestro falso pan rallado hasta que forme una pasta espesa y homogénea.

La metemos media horita en la nevera para que sea más fácil de trabajar, mientras tanto podemos precalentar el horno a 150ºC, forrar las bandejas con papel de horno y tener a mano la mermelada de frambuesa.

Cuando saquemos la masa de la nevera formamos con ella bolas de unos 2-3 cm y las colocamos en la bandeja del horno bien separaditas, las aplastamos un poco y ahuecamos en el centro con la ayuda de la yema de los dedos.

Rellenamos ese hueco con un poco de mermelada y horneamos 20-25 minutos,  hasta que estén doradas.

Una vez fuera las pasamos a una rejilla para enfriar y luego nos las zampamos con un buen café, bueno vale también podéis coger un té.

 Ahora la sorpresita, quería comprobar si eran galletas aptas para decorar y claro tal cual queda la masa imposible, pero añadiendo un poco más de harina para que quede un poco más consistente, ¡sin problemas!.

Mi pequeña y yo decidimos hacer nuestros primeros Bob Esponja y Patricio ya que tenía glasa para gastar en la nevera.

No quedé satisfecha 100% pero si muy contenta ya que al menos seguro que los reconocéis, jejeje.

Mi niña no podía ser menos así que decoro ella sola también las suyas, la verdad que Bob Esponja parece que de verdad acaba de salir del mar, jajaja, que malilla soy, pero Patricio quedo muy pero que muy competente.

Estas galletas se conservan muy bien, muy bien una semana bien cerraditas mas aún.

Espero que os guste y gracias por leer.